Y con esas frases en la boca, que se salían de los más hondo del corazón, iba la pobre detrás del hijo querido. Los presentes estaban conmovidos. Y finalizaba el sacerdote su recuerdo de aquel lance:
-¡Hay que ver cómo son las madres! ¡Las madres son así!...
¿Cómo has tratado a tu madre en este mes de mayo, mes de las madres, mes de la Virgen María? ¿Te has detenido un tiempo a pasar a saludarla, felicitarla, rezarle, regalar una flor, una jaculatoria? Este mes de mayo, hagamos algo diferente y especial, para nuestras madres (la terrenal y la del cielo). Que no se nos olvide mostrarles todo el amor y cariño que le tenemos con nuestras acciones y nuestro día a día, que como ya vimos ellas entregan el corazón por nosotros.
En los pequeños detalles se encuentran nuestras mejores muestras de afecto. Haciendo un sacrificio, ya sea: limpiando algún cuarto de la casa, poniendo la mesa, limpiando los trastes sucios, preparar algo de comer, en general, ayudarle con algo de la casa. Es puede ser un muy buen detalle para nuestra madre. Y, para la Virgen, un Ave María cada día, un misterio del Rosario, o incluso el Rosario completo, etc. Sin embargo, que esto no se quede en sólo un día, sino que se realice en todo su mes.
Por último, no olvidemos que nuestra madre es quien nos dio la vida, y la seguirá dando todo el tiempo para que nosotros alcancemos la plenitud del amor, paz y felicidad. Unos detalles que le hagamos representan muy poco de todo el cariño que nos ofrecen. ¡Pongámonos en acción y hagamos este mes de mayo inolvidables para todas las mamás!
Y tú, ¿ya le regalaste algo a tus madres hoy?
Bendiciones para todas las mamás y veneramos a nuestra madre que está en el cielo.
Bernardo Daniel Treviño Caballero
Coordinador de Creando Conciencia