Este es el ejemplo de una muchacha que sonríe para que pase inadvertido su dolor.
Le gusta la música, el canto, los bailes populares. La sardana la baila como ninguna. Y sobre todo le gusta el contacto directo con la Naturaleza. Tiene diecisiete años. Le encantan las excursiones. Su alegría es contagiosa. A su lado nadie puede estar triste.
Es tal su serenidad y su alegría ante la muerte, que sus padres temen que se le haya olvidado que va a morir pronto.
–¡Montse! –le ha preguntado su madre–, ¿es que crees que te vas a curar?
–No –contesta.
Sabe que todos los remedios médicos han fracasado.
–Pido a Dios que me dé fuerzas para ser fiel hasta el último momento.
En medio de aquellos sufrimientos sin cuento dice en otra ocasión:
–Abrid las persianas bien abiertas; quiero tener luz, que esté todo bien alegre. Su padre, con lágrimas en los ojos, hacía como que leía el periódico para disimular. Montse se dio cuenta y le dijo:
–Papá, que no te oigo, quiero que estéis alegres.
Dios le concedió lo que da a todas las almas que saben servir a los demás: la alegría, una alegría grande. Ah, pero no te he dicho lo mejor. Esta chiquilla alegre, contenta, de buen humor, cariñosa, generosa, murió en un Jueves Santo, en Barcelona, hace unos años. Y poco después se abrió el proceso de Beatificación.
¿Cómo estuvo tu día hoy? ¿Sonreíste o mostraste la alegría de poder vivir un día más? ¿Te entristeciste por los pequeños problemas que se te presentaron hoy?
Así como Montse, Dios lo que te quiere pedir es lo siguiente. Y es que, ha pesar de todas las cosas malas que te puedan detener: hacer sufrir, perjudicar, algún contratiempo que pueda salir, alguna molestia, enfermedad o una angustia, no permitas nunca, pero nunca, que se te quite esa alegría de tu rostro. Contagia a todos con tu sonrisa, con tu alegría. Que así como Montse, estando a tu lado nadie, NADIE pueda estar triste.
Esta es tu tarea, trata de cumplirla con tu mejor esfuerzo y no te imaginarás las recompensas que tendrás en esta vida y en el Cielo.
Bernardo Daniel Treviño Caballero
Coordinador de Creando Conciencia