Raramente, estos grandes árboles tienen unos sistemas de raíces inusualmente cortas que solo se encuentran debajo de la superficie del suelo para obtener toda la humedad de la superficie posible. Y esta es su vulnerabilidad.
Sin embargo, muy pocas veces se verá uno de estos gigantes derribado por tormentas porque ellos crecen en rocas y sus raíces enredadizas proveen sosten el uno para el otro en tiempo de vientos recios.
El dolor y el sufrimiento nos llega a todos. Pero, así como estos gigantes árboles Sequoia, podemos ser sostenidos en esos tiempos díficiles por el toque de las vidas de otros. El saber que tenemos a alguien; que no estamos solos; que hay alguien que está dispuesto a tocarnos, sostenernos, guardarnos de ser destruidos.