Sus superioras han pensado llevarla a Lourdes por ver si la Virgen quiere hacer con ella un milagro, como lo ha hecho con tantas otras personas. Les perece lógico que la vidente tenga más "derecho" que ningún otro a recibir una caricia de la Madre del Cielo. Bernadette responde a la propuesta:
-Oh no, eso no es posible..
-¿Y por qué no había de ser posible?
-Porque ese manantial no ha surgido para mí.
No lo entienden las religiosas. ¿Por qué no iba a ser para ella? Pero Bernadette insiste en que el manantial no es para ella. No es que la Virgen se lo haya comunicado expresamente, pero ella lo sabe, está segura. No cesa de repetir:
-Es que yo lo sé...
Cfr. F. Werfel, La canción de Bernadette